Mostrando entradas con la etiqueta novias. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta novias. Mostrar todas las entradas

lunes, 27 de mayo de 2013

Joyas bordadas en tul de novia: Jenny Packham

 
Mi entusiasmo por los bordados-joya se encontró con el virus de esta macrotendencia que ya invade tooooda la indumentaria. Pero en las novias tiene una gran performance y una gran intérprete: la inglesa Jenny Packham.


Nacida en 1965, se graduó en Modas con honores en la Southampton Solent University, consiguiendo especializarse en bodas y eventos especiales. Comenzó diseñando vestidos y accesorios pero se fué centrando en las joyas, con una clientela va desde actrices de la talla de Angelina Jolie o Dita von Teese,  hasta las mujeres de la realeza. Porque con 25 años de trabajo ella es ahora una referencia ineludible en el rubro.



Lujo y brillo son para Jenny apenas excusas para retomar la antigua tradición del bordado en piedras de su época de oro, aunque ella le ha dado otra vuelta de tuerca apostando por los años 20 y 30 con sus audaces diseños en joyas falsas. Así que con mucho de romanticismo y de locura, toda su producción es marcadamente bohemia y artística.
¡Aquí va!


Una ancha tiara que recuerda muchísimo las que se usaban en los años 30
 
 
En el otro extremo del diseño, un arreglo muy orgánico y natural, tipo art-nouveau.
 
 
 
 
 
Dos largos collares que recuerdan mucho a esos años locos, ¿no?
 
 
Como una joya luce este brazalete bordado en cristales.
 
 
¡Originales pendientes de seda y cristal!
 
Un bib bordado, con cristales, canutillos y perlas
 

 
Más actual y vintage en glamorosa onda sesentera.


¡Una verdadera joya son estos pendientes de cristal!
 
¿Qué les pareció? 
Yo creo que una bordadora puede ser una gran artista ¡y Jenny Packham es una de ellas!


 

domingo, 14 de octubre de 2012

¡El glamour de la novia cabe en una cartera!

 
 
 
 
 
En una ceremonia eclesiástica y nocturna, la novia se presenta como una reina: su nobleza esta en el porte que le da el vestido largo; el ramo es su atributo.
Pero en una boda diurna, el ramo es menos importante y con el vestido corto comienza a cobrar protagonismo la cartera, un accesorio que permite toda la fantasía, el romanticismo y los detalles que una novia moderna y glamorosa puede llevar.
Para la novia, en general la cartera no debería ser demasiado grande: es óptimo uno tipo minaudiere, bolso muy muy pequeño pero muy elegante.


 
Este outfit es de Chanel: en él, el protagonismo de la cartera es evidente.

La cartera se valoriza y realza tu vestuario mucho más en contraste con el vestido, es decir: si tu vestido tiene textura, que la cartera sea lisa y sedosa como el agua; si tu vestido es sencillo, entonces la cartera es la encargada de levantar el look con dibujos, color, texturas y forma.
No obstante, cierto barroquismo esta muy de onda. Dentro de este estilo el dorado y el blanco se acompañan con energía.

 

Lo mismo vale para el brillo: la cartera es un buen accesorio, porque su tamaño es acotado, para lucir mucho brillo. ¡Pero ojo con una que este íntegramente revestida en lentejuelas! ¡Se vé muy caché!


Este pequeño sobre se limita a repetir con gracia el motivo del vestido. Una opción válida cuando no querés "rebajar" un look tan alto.

 
 
Otra opción actualísima: bolsito tejido al crochet: agrega textura sin brillo
 
Para ir complementando tu atuendo con los tips de la suerte de nuestras abuelas: hay que llevar algo nuevo, algo viejo, algo azul y algo prestado, la cartera, si es vintage, es ideal.
 
 
 Este antiguo bolsito de terciopelo celeste hielo con exquisita puntilla de encaje a bolillo y bordados en piedras es un encantador detalle que acerca lo más delicioso de la tradición femenina a tu ceremonia.


 
El color es un aliado del día. Aquí vemos junto a un vestido de encaje beige,
un estuche en damasco color dorado. ¡Super fashion!
 

 
 
Los pasteles son otra opción muy en boga. Esta cartera ultra cool cumple con todos los requisitos: pequeña, diura, con brillo ¡y muy, muy fashion!
 
 
Con contraste y muy chic: bolsito de cuero con aplicaciones de tachas y piedras.

Judith Leiber, es una joyera que terminó haciendo estupendos bolsos para fiestas, porque sus bordados en piedras y las formas que dió a sus carteras recuerdan pequeñas y lujosas esculturas. Y luego se especializó en carteras para novias e invitadas a bodas. Ella recomienda llevar la cartera lo más pequeña posible. Adentro van el documento, un corrector de maquillaje, pañuelo, labial, aspirina y...¡lista!
He aquí una de sus creaciones de alto lujo...
 

 

 
... originalidad en versión polícroma y con forma de ramo. ¿Te gustó?
 
 

martes, 25 de septiembre de 2012

Novias 2013, diademas y demás




Este año, la tendencia boda se expresa sobre todo en los accesorios, que complementan vestidos bastante minimalistas. Las novias llevan algo inusual en ellas pero que hace furor hace varias temporadas: aretes grandes. Perlas y cristales se lucen espléndidamente también en diademas, complementando así los peinados altos y recogidos muy tensos en la frente.



Ajustada pollera de encaje y gran volado sobre el torso recuerdan el vestido de una bailadora flamenca. El peinado con raya al medio, los grandes aros y la didema remarcan este look. El complemento que comienzan a usar las novias diurnas: una pequeña cartera con broche de perlas.


 
 
Dos diademas y pulsera tipo cuff: acertadísimo arreglo para este vestido tipo túnica romana.
 
 
 
Otro especial para túnicas: Carolina Kurkova lleva esta doble diadema para sujetar sus cabellos ¡no tan tirantes aquí!
 
 
 
Casi como una cofia medieval:
la cinta con riquísimo bordado de strass subraya este peinado muy pegado a la cabeza. 
 
 
 

Otro peinado pegado, pero con melena tipo años ´30.
La didema se compone de un exquisito tejido de cristales. 
 
 
 
 
 
Visible como un tocado, esta diadema mezcla textil con perlas, igual que los aros.
 
 
 
Más trendy, igual tendencia.
 
 
 
 
Una colorida novia de Oscar de La Renta: pendientes y diadema de flores
a tono con el estampado del vestido


 

viernes, 24 de agosto de 2012

Las joyas bere-ber de las virgenes católicas

 
 
El centro de Buenos Aires está plagado de iglesias de todos los credos, pero de todas ellas, las católicas siempre me inquietaron. 
En ellas es usual encontrarse con estatuas cuyos cuerpos martirizados y rostros dolientes generan gran aflicción. Tanta, como para hacerme sospechar que su iconografía tenebrosa es parte de una efectiva "pedagogía" de la culpa para pueblos no lectores.
Así, de iglesia en iglesia y en medio de tanto temor y temblor, comencé a interesarme por algunas vírgenes de pacífico semblante y ricos trajes, damas enjoyadas parecidas a la novia bere-ber que ven acá arriba.

 
 
 
Nuestra Señora de los Desamparados


 
Virgen de las Nieves


Primero fué La Virgen de los Desamparados y Nuestra Señora de La Paz. Luego Nuestra Señora del Carmen. La "vírgen blanca" o Señora de las Nieves también la recuerda bastante, en una versión más afrancesada. Incluso nuestra vernácula Vírgen de Luján.

 
La Virgen de Luján es bastante discreta: lleva un collar mediano y un rosario largo de perlas. Pero por la forma de su traje, la distribución de sus paños y las largas hileras de abalorios, es imposible no relacionarla con las anteriores. Como ellas, también lleva una corona por encima de su velo.  Y... ¡resulta que ese increíble atuendo cargado de joyas viene de España y se llama "traje de Vistas"!
 

A la derecha, la Virgen de los Desamparados, oriunda de Valencia.
Observense los collares que cubren el vestido en todo su largo y el torso en todo su ancho, así como la gran cantidad de dijes que penden de cadenas y pliegues.
 
Mucho es el enorme parecido entre estas vírgenes y este traje, que en rigor es un traje de boda. Aunque más sorprendente aún es la semajanza entre estas joyas y las de las mujeres bere-ber.
Si entrás por aquí, y aquí, verás mucho sobre sus orígenes y significados. Sí, sí, ya sabemos que hubo un tiempo donde en España vivieron los pueblos nómades del Sahara.



 
Novia bere-ber
 
El traje oscuro funciona como el marco adecuado para que la novia luzca esa suerte de "dote ambulante" que ostenta gran riqueza material y cultural. Collares cortos de corales con pequeños elementos de plata lamados manojos y manojitos, collares largos o vueltas: primero media vueltita, luego dos vueltas chicas, después tres medias vueltas, en las que ya se mezclan unas cinco vueltas grandes con trozos de coral con bolas o bollagras y patelas, y los carretes de plata filigranada y sobredorada de las que cuelgan diversos tipos de amuletos.


 
Detalle de los collares con sus bollagras y patelas ( placas que se enhebran entre las bolas), crucifijo, tablillas, medallones, corales, crucifijo y carretes como el que se ve aquí con tres medallitas pendientes de cadenas...
Relicarios, la Santa faz, cruces, águilas bicéfalas, lunas en cuarto creciente, hasta la última vuelta grande, solo formadas por bolas y carretes de las que cuelgan tablillas.
 


Corazón de la novia y dijes en forma de luna creciente.

Entre los dijes más importantes uno representa el corazón de la novia, que se prende sobre el pecho.

Relicario y truchita articulada.


Luego vienen las brazaleras, unas cadenas con dijes en forma de truchas articuladas, castañas, cruces, campanas, evangelios, medallas, sonajeros y etc., etc.,  que se enganchan en las axilas. Por si todo esto fuera poco hay también aros tipo pendientes, rosarios y sortijas de mano.



 
Este pequeño collar bere-ber reúne muchas características que nombramos: grandes bolas en filigrana, pequeños cascabeles y dijes móviles en plata, ramitas de coral.  



 
Joyas de un puesto callejero en el mercado callejero de  Puerta de Mahdia, Tunez.
Es notable el parecido de los collares de perlas con los de las vírgenes, asó como la cantidad de dijes en filigrana que penden de cadenas.  

 
La Medea que interpretó María Callas, con el irresistible traje de Vistas como inspiración.
 
Puesto que nuestras vírgenes protectoras llevan este cuño, ¿quien podría sustraerse a tanto brillo y seducción?¿Y quien no puede rememorar en este traje esta fabulosa novia de Christian Lacroix?


 
 

domingo, 27 de mayo de 2012

Novias: con vestido corto y mucho estilo


Apenas sancionada la ley de matrimonio igualitario y con el proyecto de divorcio igualitario a punto de ser reglamentado, la ceremonia del matrimonio civil cobra en Argentina gran importancia. Ahora, las novias llevan su vestido blanco de mañana, por la calle y a un ritual no religioso que sigue suscitando emoción. Pero la tradición tiene su encanto, y se impone con adorables vestidos cortos. Eso sí: con la pollera corta las proporciones varían y ya no admiten los mismos accesorios que para los vestidos largos. ¿Qué ponerte con tu vestido de novia blanco, corto y diurno?
Aquí va:


¿Te parece romántico? Un típico tailleur estilo Chanel
con bordado en perlas, con velo, con ramo textil de azules ortencias, con collar y medias blancas. 
Te verás radiante.



Femenino, sensual y delicado a la vez, vestido de encaje y breve tocado de tul sobre tu mirada.



  Collar babero de cristales, velo de tul fruncido hasta la mitad de la espalda
y dulces zapatitos con moño rosado.



Para este cuello cerrado y el encaje de algodón, el brillo de unos pendientes de cristal es el complemento ideal. 




Más que glamorosos para "cortar" la blancura: los stilettos "joya".


Un sencillo y alegre velo adaptable a cualquier equipo, incluso a unos pantalones.


    

Muchas veces son los detalles y accesorios los que "cierran" un look.


 

Un vestido que podría ser de calle en el que el cinturón pone el tono de ocasión excepcional


El ramo artificial permite incluir pedrería, brillos, pasamanerías...
mucho del aderezo utilizado en una boda nocturna


Algo que corta y destaca el blanco: pulsera y lazo sujeta pelo,
a juego con los detalles negros del vestido.


Acertado vestido blanco con tocado, flor y pep toes negros.

Como ves, el vestido corto blanco admite que algún toque de color no le quite protagonismo a su tono matrimonial.





Original, antiguo y moderno a la vez, tejido a dos agujas, con puntillas, tul y otra vez el color negro. En la gorra y el lazo que deja ver el pequeño miriñaque.



Plataformas con moño de organza y empeine con cuero calado al modo de una puntilla.

Recordá que con escotes asimétricos no quedan bien los collares, sí los aros y adornos en el pelo. Para un vestido corto el tocado, ramo, pulseras, anillos, guantes, medias y zapatos son importantísimos para cerrar el look con mucho equilibrio. ¡Pero no recargues! Todo lo que lleves en el torso y principalmente alrededor de tu rostro quedará como un recuerdo en tu álbum de fotografías.